El Derecho Ante la Crisis: Nuevas Reglas de Juego

La crisis nos afecta a todos de alguna manera, tanto al sector público como al sector privado. En ambos se desarrolla la actividad de Mutua Tinerfeña y, más concretamente, en el campo del seguro o de las coberturas de riesgos. ¿Por qué apoyar una investigación universitaria sobre la crisis en la coyuntura actual? Por varias razones. La primera, porque todo está relacionado. Así, en el funcionamiento de los mercados, no resultará ocioso preguntarnos qué ha hecho hasta el momento la Administración Pública para afrontar la situación, cómo incide la situación en los empresarios que han contratado con ella, en los trabajadores por aplicación de la reforma del mercado de trabajo, en los ciudadanos por los préstamos hipotecarios que tienen contratados, por el aumento de la presión fiscal o por el deterioro de sus activos y, en fin, en el funcionamiento de múltiples servicios públicos. De todo ello trata el presente estudio. Lo público y lo privado están presentes y relacionados de forma inescindible como parte de un todo. Si lo público va mal, le va mal al sector privado; si éste no funciona, lo público se resiente indefectiblemente. La segunda, porque ahora es precisamente el momento de apoyar la investigación y a la Universidad. Sin investigación no existe desarrollo. Si no hay un análisis sereno, ponderado y con cierta distancia del día a día, no podremos comprender todos los cambios que se han producido y que aún se producirán. De todo esto hay en el presente estudio. La tercera es porque el análisis se hace con el rigor propio de un conjunto de profesores universitarios de larga trayectoria y calidad, pertenecientes a la Universidad de La Laguna, motivo por el cual esa iniciativa no puede quedar sin nuestro apoyo. Compartimos un mismo fin: ayudar a los demás, a la sociedad en la que actuamos. Unos poniendo sus conocimientos y experiencia al servicio de ella; nosotros asegurando ciertos riesgos que los ciudadanos o las propias Administraciones Públicas asumen, cubriendo en esencia y por nuestra propia naturaleza los riesgos mutuos de todos, por todos y entre todos. Y esos riesgos serán menores si la situación se comprende y conoce mejor, lejos del interés partidista de la confrontación política, de la opinión tertuliana y de la opinión a «bote pronto» realizada sin la debida mesura. Seguro que existirán otras muchas razones, pero excederían de lo que no pretenden ser más que unas simples notas de presentación.